Carta sin escribir.

Querido desconocido:

¡Hey¡  te escribo porque nunca volteas para verme.
Estamos en la misma clase, en el mismo curso y con el mismo profesor.
Pero jamás te das cuenta de mi presencia, ayer yo fui la que te puso ese muffins en la biblioteca; claro, pero como la chica bonita se apareció ahí.
Ni pensaste que quizás yo fui, jamás me mira; no trato de que me veas, tampoo.

Yo sólo te veo de reojo , no quiero persiguirte; menos acosarte.Yo creo que no me haces caso porque soy horrible.

¿Qué tiene mi cabello, cara u ojos?

Yo sé que no soy bonita, pero creo que tú eres un acomplejado. Sabes no te entregaré esta carta, ya no tiene sentido; hace tres minutos quería dártela en el bebedero.

Pensándolo bien lo botarás y yo seguiré siendo la estúpida ilusionada; para luego ser tu burla desmesurada.

Adiós rata de alcantarilla

Resplandor de Luna

!Hola!.
no sé quién eres , no tengo la menor idea cómo llegamos acá, sólo sé que empezé a sentir algo por ti hace tres minutos.

Tú me miras, sólo buscas la forma de huir y escaparte de aquí; quizás yo se él motivo por el cuál quieres huir o es que eres claustrofóbico. yo también quiero salir; no quiero pasar las próximas horas encerrada en cuatro paredes, perdona, pero no te ayudo porque quiero pasar el tiempo contigo.

¿Cómo llegué aquí?

Sólo recuerdo que Julio - mi mejor amigo- me envió aquí para buscar leña para la fogata de esta noche de luna llena. Tú apareciste corriendo, entraste y cerraste la puerta cuando yo estaba dispuesta ha salir; te diste cuenta de que la puerta sólo se habría por fuera y con llave por dentro. ¿Tenías llave acaso? , no.

Te miré con cólera y me fui ha sentar a la esquina, tú te quedaste parado me miraste dos veces sin ninguna emoción y empezaste a buscar una ventana.

Ya te rendiste, no podías romper esa ventana. ¿no ves? ; tiene fierros por todos lados.

Esperar que alguien venga es una idea no muy prometedora, mi corazón latía tres veces por minuto; mir espiración estaba rara - no era por él , soy asmática - empezé a mirarlod etenidamente sin sonreír. Él ya me miraba, sonreía y perdía su mirada en el espacio. Nunca decía nada y yo tampoco hablaba , más que en mis pensamientos.

!Abren la puerta!


Julio estaba alfrente, me miró desorientado. No tenía idea quién era el que estaba conmigo ; me ayudó con la leña . yo fui atrás de Julio.

Él salió y desapareció bajo la luz de la Luna.